Un día como hoy, en el año de 1954  nació en Sabaneta de Barinas Hugo Rafael Chávez Frías. Sus padres un matrimonio de maestros de educación primaria -Hugo de los Reyes Chávez y Elena Frías, pero fue  criado por su abuela india, Rosa Inés Chávez, quien cuidó de él y de su hermanos mayor, le enseñó a leer y a escribir, mientras el pequeño Hugo ayudaba a la economía familiar vendiendo dulces de lechosa, conocidos como “arañas”; motivo por el que se  le conocía como el “arañero de Sabaneta”.

Los estudios primarios los realizó en el Grupo Escolar Julián Pino en Sabaneta, la secundaria en el Liceo Daniel Florencio O’ Leary, graduándose de Bachiller en ciencias, sus estudios superiores los realiza en la Academia Militar de Venezuela, de donde egresa, con el grado de Subteniente el 5 de julio de 1975, también es licenciado en Ciencias y Artes Militares, rama Ingeniería, mención Terrestre; realizó varios cursos entre los que se destacan:  Curso Medio de Blindados del Ejército, año 1979. Curso Avanzado de Blindados, año 1983. Curso de Comando y Estado Mayor, Escuela Superior del Ejército, años 1991-92. Curso Internacional de Guerras Políticas, en Guatemala, para 1988. Cursó la maestría en Ciencias Políticas en la Universidad Simón Bolívar, entre los años 1989-90, quedando por presentar la tesis. En el campo deportivo se destacó como jugador de beisbol en el equipo de los Criollitos de Venezuela, también fue monaguillo lo cual lo llevó a considerar una carrera tanto como deportista como de sacerdote. Dio sus primeros pasos en política cuando aún estaba activo en las Fuerzas Armadas al fundar de forma clandestina el Movimiento Bolivariano Revolucionario (MBR200), inspirado en las ideas de Simón Bolívar, Simón Rodríguez y Ezequiel Zamora.

En 1992, junto con otros militares del MBR-200, intentó un golpe de Estado contra el entonces presidente Carlos Andrés Pérez, el que fracasó y por el cual fue encarcelado durante dos años, hasta ser indultado por el entonces presidente Rafael Caldera. Chávez se postuló a los comicios presidenciales de 1998 con el apoyo del Movimiento Quinta República (MVR), y tras obtener la victoria se convirtió en el 47.º presidente de Venezuela, con lo que buscaba consolidar la llamada Revolución bolivariana basada en su proyecto socialismo del siglo XXI.

Tras ser el ganador de las elecciones en el año de 1.998, abogó por derogar la Constitución de Venezuela de 1961, impulsando un Referéndum constituyente que fue aprobado por más del 80% de votación popular, luego impulsó un segundo referéndum constitucional que resultó en la ratificación de la nueva Constitución de Venezuela de 1999 con el 71,78% de los votos; así entra en vigencia la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, donde se garantiza la  participación ciudadana como derecho, deber y obligación.

 Hoy 28 de julio de 2013, el Contralor (P) del estado Amazonas abogado Guillermo Forti, y todo el personal de la Contraloría, conmemoramos el 59 aniversario de su nacimiento, lo recordamos con respeto, admiración y agradecimiento por ser un hombre con ideales bolivarianos y dedicado a gestar el bien y el desarrollo no solo del pueblo venezolano sino de los pueblos de  Latinoamérica, siempre preocupado por las clases más desfavorecidas y las minorías indígenas.

Le debemos el impulso de la participación ciudadana en Venezuela en todos los ámbitos, propiciando el protagonismo del pueblo de manera democrática, apoyado en los valores de humanismo, horizontalidad social, derechos humanos, pluralismo, respeto, tolerancia, convivencia y  toma de decisiones;  de esta manera la participación ciudadana fortaleció  la contraloría social fomentada por los Entes contralores en diversos ámbitos como: escuelas, comunidades organizadas, consejos comunales, entre otros; desde donde se promueve la supervisión y rendición de cuentas, con pruebas fehacientes inherentes a la actuación de cada uno en roles que se le otorga la ciudadanía.

Podemos decir que Hugo Rafael Chávez Frías, a lo largo de sus años de gobierno concretó grandes logros sociales, hizo visibles a los invisibles, redistribuyó la renta petrolera, abatió el analfabetismo y la pobreza,  incremento los cupos universitarios para estudiantes de extracción social popular, elevó los índices de sanidad, incrementó el salario mínimo, creó mercados populares con artículos de primera necesidad a precios subvencionados por el Estado; en el contorno internacional fortaleció el polo de los países petroleros por sobre las grandes compañías privadas.